sábado, 19 de febrero de 2011

Joan Manuel Serrat. Disculpe el señor


Disculpe el señor
si le interrumpo, pero en el recibidor
hay un par de pobres que
preguntan insistentemente por usted.

No piden limosnas, no...

Ni venden alfombras de lana,
tampoco elefantes de ébano.
Son pobres que no tienen nada de nada.

No entendí muy bien

sin nada que vender o nada que perder,
pero por lo que parece
tiene usted alguna cosa que les pertenece.

¿Quiere que les diga que el señor salió...?

¿Que vuelvan mañana, en horas de visita...?
¿O mejor les digo como el señor dice:
"Santa Rita, Rita, Rita,
lo que se da, no se quita...?"

Disculpe el señor,

se nos llenó de pobres el recibidor
y no paran de llegar,
desde la retaguardia, por tierra y por mar.

Y como el señor dice que salió

y tratándose de una urgencia,
me han pedido que les indique yo
por dónde se va a la despensa,

y que Dios, se lo pagará.

¿Me da las llaves o los echo? Usted verá
que mientras estamos hablando
llegan más y más pobres y siguen llegando.

¿Quiere usted que llame a un guardia y que revise

si tienen en regla sus papeles de pobre...?
¿O mejor les digo como el señor dice:
"Bien me quieres, bien te quiero,
no me toques el dinero...?"

Disculpe el señor

pero este asunto va de mal en peor.
Vienen a millones y
curiosamente, vienen todos hacia aquí.

Traté de contenerles pero ya ve,

han dado con su paradero.
Estos son los pobres de los que le hablé...
Le dejo con los caballeros

y entiéndase usted...

Si no manda otra cosa, me retiraré.
Si me necesita, llame...
Que Dios le inspire o que Dios le ampare,
que esos no se han enterado
que Carlos Marx está muerto y enterrado.



martes, 1 de febrero de 2011

El Mahabharata y el Ramayana

El Mahabharata (India)

El Mahabharata es el resultado del mayor de los esfuerzos hechos para conservar en una forma colectiva todas las creencias antiguas y tradiciones de la raza.

El mismo nombre Mahabharata muestra que el movimiento que culminó en la compilación de esta gran obra estuvo respaldado por una conciencia viva de la unidad de el Bharata o pueblo indio. Por esta razón se puede encontrar en esta obra un gran esfuerzo hecho para presentar de una manera completa los ideales que se encuentran en el organismo social, la religión, la historia antigua, la mitología y la ética del pueblo indio.

Entonces, si deseamos seguir la mitología india desde sus confusos orígenes a su perfecta madurez a través de todas sus fases intermedias y multiformes, no tendremos una mejor referencia que el Mahabharata.

En la India la mitología no es un simple sujeto de investigación y disquisición de anticuarios; aquí todavía está presente influyendo en la vida de la gente como un control. Y es esa mitología viviente que, pasando por las etapas de representación de procesos cósmicos sucesivos y asumiendo entonces una forma definitiva, se ha convertido en un factor poderoso en la vida cotidiana de la gente —es esta mitología viviente la que ha encontrado sitio en la Mahabharata.

Debe entenderse que es la mitología que ha dejado su huella más clara en el Mahabharata la que ha alcanzado una forma totalmente desarrollada, y ejercido una potente influencia sobre la sociedad india. Otros mitos han aparecido durante algún tiempo de una forma imprecisa y luego se han desvanecido como el humo, dejando poco rastro; ellos no han asumido una forma concreta en la memoria de la raza. Así es como encontramos un dicho popular proveniente de Bengala que dice: «Lo que no se encuentra en el Mahabharata no se encuentra en la tierra de Bharata (India).»

En el Mahabharata encontramos por un lado las formas originales de la mitología y por otro lado también sus formas completamente desarrolladas. Encontramos en esta creación de la mentalidad india una completa revelación de esa misma mentalidad. En la infancia de la mentalidad humana el hombre solía mezclar su propia fantasía y sentimientos con los caminos de los pájaros y bestias, los distintos fenómenos de la tierra y el agua, y los movimientos del Sol, la Luna, las estrellas y los planetas, y el hombre contemplaba la totalidad del universo en esta forma humanizada.

En tiempos posteriores, cuando el hombre alcanzó la mayor importancia ante sus propios ojos, la gloria de los mundos estelares palidecieron frente a la grandeza de la humanidad. En este libro hemos tratado ambas etapas de la mitología, tanto la inicial como la final. Por un lado, hemos ofrecido una perspectiva de las formas originales que asumía la mitología después de pasar por la incierta indefinición de épocas primitivas. Por otro lado, hemos relatado con más detalle las historias de la época en la cual la mitología alcanzó su madurez.

EL RAMAYANA (India)

VALMIKI es un nombre casi tan oscuro como Homero. Él fue, sin duda, un brahmán de nacimiento, y estrechamente conectado con los reyes de Ayodhya. Él recogió canciones y leyendas de Rama (posteriormente llamadas Rama-Chancha, en diferenciación de Parashu-Rama), y probablemente algunos añadidos fueron hechos a su trabajo en un momento posterior, particularmente el Uttara Kanda. Se ha dicho que él ha inventado el metro shloka, y que se debe a él la forma definitiva del lenguaje y el estilo de los poemas épicos indios. De acuerdo con el Ramayana, fue un contemporáneo de Rama, que amparó a Sita durante sus años de solitario exilio y enseñó el Ramayana a sus hijos Kusa y Lava. Lo esencial del Ramayana, en su forma más simple la historia de la recuperación de una novia raptada, no es diferente de otra gran epopeya, la Ilíadade Homero. No parecería, sin embargo, aunque una visión lo sugiriera, que la Ilíadaderivara del Ramayana: es más probable que ambas epopeyas se remonten a fuentes legendarias más antiguas que 1.000 años a.C. La historia de Rama es relatada en uno de los Jatakas, que puede ser considerado como una versión más corta, una de las muchas entonces corrientes. Probablemente en un momento durante los últimos siglos anteriores a Cristo las versiones corrientes de la saga de Rama fueron recogidas por el poeta Brahmán, y formuladas en una historia con una trama coherente; mientras que su forma completa, con el Uttara Kanda agregado, podría ser tan tardía como del año 400 d.C. Como un conjunto, el poema en su última redacción parece pertenecer esencialmente a la fase más primitiva del renacimiento hindú, y refleja una cultura muy similar a la visiblemente representada en los frescos de Ajanta (siglos I a VII d.C.); pero por supuesto el tema es mucho más antiguo. La versión dada en el presente volumen asciende a aproximadamente un vigésimo del Ramayana total. Es una traducción condensada, en que todos los contenidos esenciales están incluidos; mientras que ha sido excluido todo episodio o personaje para el cual el original no ofrece autoridad.









Los vedás

Se denomina Vedás a los cuatro textos sánscritos que forman la base del extenso sistema de textos sagrados del hinduismo.
La palabra vedá proviene de un término indoeuropeo relacionado con la visión (*weid-). En sánscrito literalmente significa ‘conocimiento’.
Los textos védicos se desarrollaron dentro de lo que se denomina la cultura védica, basada en castas (varna o ‘color’) y āśramas (etapas de la vida).
Los cuatro Vedas: En conjunto, los cuatro Vedás, los Upanishads y los Vedanta sutras se llaman shruti (‘lo escuchado’), la revelación comunicada oralmente por Dios a algunos sabios en el pasado.
Rig vedá, el más antiguo, escrito en una de las formas más arcaicas del sánscrito, posiblemente antes del 700 a. C.

Iayur vedá, el libro de los sacrificios.

Sama vedá, que contiene himnos.

Atharva vedá, el libro de los rituales.

Los Upanishad, meditaciones místico-filosóficas escritas hacia el 600 a. C.

Cada Veda, a su vez, consta de cuatro partes:

Samhita (himnos)

Bráhmana (rituales)

Araniaka (interpretaciones) y

Vedānta (los Upanishad).



Se usa este término śruti en contraposición al de smriti (‘lo recordado’) que es el resto de la literatura védica: los Puranás, los Itijasa (historias, como el Majábharata y el Ramaiana), etc., que se consideran explicaciones escritas por el mismo Viasa para ayudar a los humanos a entender los crípticos Vedás.
Los tres primeros Vedás fueron la división principal original, también llamada trayī (‘[la] triple’, esto es:
el Rig vedá (el recitar poético),


el Iáyur vedá (uso del sacrificio) y


el Sāma vedá (cánticos).[1]


Esta triplicidad se introduce en los textos bráhmanas (en el Shatapatha Bráhmana, Aitareia Bráhmana y otros), pero el Rig vedá es el único trabajo original de los tres, que junto a los otros dos desarrollan el concepto.
Cada Vedá se subdivide en dos partes claramente identificables:


1.Mantras, esto es, las palabras de oración y adoración dirigidas al fuego, a alguna forma del Sol o a alguna forma del aire, cielo, viento, etc. con pedidos de riqueza, salud, longevidad, ganado, hijos, victoria, e incluso perdón de los pecados (Ver el «himno Gáyatri», la oración secreta que cantan los bráhmanas tres veces al día).

2.Bráhmana, consistente en vidhi y artha-vāda (es decir, explicaciones detalladas para llevar a cabo ceremonias en las que se podían utilizar con provecho los mantras).